jueves, 5 de julio de 2012

"Esperemos que tu próxima pareja haga más planes contigo"

Antes todo era diferente. Y me gustaba más, mucho más.
Antes, cuando esto no había hecho nada más que empezar, cuando un mes más juntos era algo que celebrar. Tú nunca hubieses dejado que me fuese sola a casa, y menos por la noche, tarde y arreglada... Y no es por hoy ni por ayer ni por ningún día en concreto que no me hayas acompañado a casa. Es que antes no era así. Cuando eras tú el que tenía 18 y 19 años e ibas caminando a todas partes. Nunca te cansabas, nunca te dormías. Y salías corriendo para verme donde yo estuviese, para besarme, para abrazarme... Antes, cuando te sorprendía mi ropa y me mirabas con una pasión que ahora se ha disipado como el perfume en el aire.


Ahora, todo eso son recuerdos, solo recuerdos. Y dices que nos lo contamos todo, pero no es verdad. Porque yo me dejo leer y tú no. Porque quiero ser transparente y en miles de ocasiones tú sigues siendo opaco.
Ahora peleamos y discutimos y cuando te digo que nunca me propones planes para hacer, que nunca tienes la iniciativa de hacer cosas, tú me respondes: "Bueno, esperemos que tu próxima pareja haga más planes contigo"... (Dolor, lágrimas, pañuelos, me levanto y me voy) pero tú pretendes un abrazo.


Verás... decir eso, no es humor negro Es decir que estás esperando que cortemos. Es que no confías en mí ni crees en la duración de lo nuestro. Decir esa frase es recordarme todas las veces que lo he hecho mal...
Decirme eso en esta situación, es apretar la soga que me asfixia... Es volver a hacerme llorar.
Es lo peor que podías hacerme. Decirme eso, sencilla y tristemente significa mi hundimiento.