Se marchó caminando despacio intentando no mirar atrás.
Dejó una parte de su corazón debajo del andamio, en aquella calle del centro de la cuidad.
Tragó todas sus emociones y recuerdos con el último sorbo de café.
Se marchó... caminando despacio, bajo la lluvia y sin paraguas.
Intentando no mirar atrás.